Análisis | El campeón Delfín está con la capa caída

Delfín con un fútbol muy pobre perdió frente al Olmedo, quien era el último de la LigaPro, y no pudo hacerle ni cosquillas. El resultado fue 2-0 en contra de los mantenses. Los de Riobamba fueron prácticos, ordenados en la parte defensiva, y con los tres puntos en el bolsillo, ya no son los colistas de la tabla de posiciones, sumaron 10 puntos, y se ubicaron en la décima segunda casilla. En cambio, los "cetáceos" se quedaron en la décima posición con 11 puntos. El partido correspondió a la jornada 10. 

Jhon Jairo Cifuentes (der.) tuvo un partido discreto.

Para la próxima fecha, Olmedo visitará a Universidad Católica y será el sábado, a las 14h00. Los delfinistas tendrán que recibir el domingo, a Deportivo Cuenca, a las 15h30.

ACCIONES. Olmedo casi sin despeinarse le ganó a Delfín. Los mantenses en los primeros minutos se mostraron más entusiastas, con más llegadas al arco y con mejor posesión de pelota. Pero los mantenses no contaban con que el "Ciclón de los Andes" sólo lo estaba estudiando y que después de hacerlo iba a mostrar sus armas. 

Los de Riobamba se enchufaron y comenzaron a llegar con más peligro al área delfinista. El equipo que dirigía Geovanny Cumbicus tenía en la delantera a Kevin Mina y a Carlos Espinoza. Ellos le dieron muchos dolores de cabeza a la defensa "cetácea". Olmedo hizo un fútbol sencillo, eficaz y buscando a los delanteros. Delfín no tenía contención en la mitad de la cancha, el rival las ganaba casi todas. 

Joao Ortiz, de Delfín, no pudo demostrar su mejor versión.

El sistema que utilizó el campeón de LigaPro fue el 1-4-4-2. Denis Corozo volvió a ser titular en el arco; Andy Burbano, Luis Cangá, Agustín Ale, Geovanny Nazareno, en la defensa; Jerry Léon, Richard Calderón, Joao Ortiz, Martín Alaniz, en la mitad de la cancha; y en la delantera estaban Carlos Garcés y Jhon Jairo Cifuentes. 

Al club manabita le costaba correr en los 2.764 metros sobre el nivel del mar. Los volantes no se entendían, no había movilidad, tenían problemas para marcar y también para la ofensiva. Son problemas que están desde hace algunos partidos. León y Calderón no se comprendían. Mientras que por los costados tampoco mostraban lo mejor Ortiz (derecha) y Alaniz (izquierda). Garcés y Cifuentes, en el ataque, sufrían porque no les llegaba ni una pelota clara para hacer un gol.

Juan Diego Rojas entró al cambio y no logró hacer mucho para mejorar a Delfín.

La primera anotación de Olmedo llegó después de una jugada en la que Mina pisó el área, dio un pase de taco magistral para Willian Cevallos, y éste anotó con un bombazo a los 13 minutos. El segundo gol fue cuando el defensa Ale se dejó anticipar en el duelo con Mina, y el delantero marcó a los 38. Ale se puso furioso con él mismo porque se le escapó el jugador. 

A pesar de ir en contra en el marcador, los delfinistas para el segundo tiempo, continuaban con la capa caída. No había ideas y lo peor es que no había actitud. El entrenador Carlos Ischia hizo cambios para tratar de mejorar al equipo pero no fueron efectivos. Olmedo se dedicó a cuidar el resultado y cuando tenía la chance, atacaba. El club riobambeño manejó los tiempos y no se desgastó en vano. El equipo priorizó el orden. 

Además, el defensa delfinista Cangá fue expulsado con tarjeta roja directa por pisotear a un rival cuando estaba en el piso. El jugador perdió la cordura y Delfín no encuentra la brújula.